Esta simpática cacatúa no pertenece exactamente a la misma familia que las anteriores, sino que constituye un género por sí misma, el EOLOPHUS. Esta pequeña cacatúa es una auténtica joya. Se trata de un ave cariñosa, muy juguetona y una auténtica acróbata aérea.

Poco exigente y muy resistente, la cacatúa galah necesita una dieta austera, basada en un pienso extrusionado de calidad y bajo en grasa, complementado con semillas de pequeño tamaño, legumbres y verduras, debido a su marcada tendencia a engordar. A pesar de su pequeño tamaño, se trata de aves que necesitan hacer ejercicio agradeciendo mucho poder volar. Buenas candidatas para entrenarse en vuelo libre, nos dejarán boquiabiertos con su maniobrabilidad en el aire.

Tienen una capacidad muy limitada para imitar la voz humana. Extremadamente cariñosas a la par que no tan dependientes como sus primas las cacatúas blancas. Les encanta triturar cosas y las cajas de forrajeo en las que pasarán horas rebuscando semillas con las que alimentarse. Su voz no es tan fuerte como las de otras cacatúas aunque sí es un poco estridente.